Mujer, madre,
esposa, Uru del Lago Poopó
Por Edgar Jorge Rodríguez Alánez
Hablaron
todos los representantes Urus, cesan preguntas, entonces una voz tímida, como
pidiendo permiso, todos se quedan callados, ella una Uru decide hablar.
-
Yo también quiero hablar-
En
pleno día, la voz se rompe, se ahoga en llanto, un mar, desierto de “collpa” y
calor. La historia del lago y su propia existencia se rompe en llanto pleno,
quebrando los nudos de garganta de algunos asistentes.
No
habla en su lengua, como el lago su lengua ha desaparecido. Habla en quechua porque
no sabe hablar en español y se disculpa.
Todo era el lago.
-
Nuestra
vida era el lago, todo era el lago, cuando se ha ido, se ha ido también todo,
entonces no sabíamos hacer nada.
-
Nuestros
esposos no sabían hacer nada
-
Cuando
el lago se ha ido, se ha ido también la vida.
-
Todo
se ha venido abajo, como si la noche hubiera venido, las mujeres somos las que
hemos sufrido, sin comer apenas un poco para nuestros niños.
Su
llanto se vuelve convulsivo, agitado, queriendo rasgar el sol a arañazos, pero
respiraba callaba y volvía hablar
Ni adobes sabían
hacer
-
Todo
era el lago, nuestros maridos no sabían hacer nada.
-
Ni adobes sabían hacer, nada ni para trabajar
en nada.
Y
mira en derredor, busca su mirada el olvido, sus hombres habían dejado de ser
hombres con el lago, ellos habían dejado de ser, el llanto vuelve
-
En
nada podían trabajar, no sabían hacer nada
Ajara
-
La
ajara haciéndonos reñir íbamos a pallar,
-
Algunos
dueños a veces nos echaban con piedras, riñéndonos, eso nos sustentaba un poco
de aquí de allí llorando la ajara era algo.
-
Después
ellos han volteado la tierra y nada hemos podido hacer.
-
Llorando
nomas caminábamos
Machacamarca
-
Yo
recién hace un año he vuelto a Villañeque, en Machacamarca ni para trabajar a
veces, a nuestros hijos a un lado les hacían, sangre negra, animales, de todo
les decían llorando no mas en un lugar ni para ir a donde.
-
Cuando
he sabido de la escuela, ese rato como sea vamos estar aquí
-
Por
eso no es mucho tiempo que he vuelto por eso estoy hablando.
Villañeque
-
De
aquí unos cincuenta metros el lago ahora está de más de dos horas.
-
En
los suelos el viento nos ha traído la sal y ha vuelto salitroso el suelo encima
ha matado el cauchi y ha aparecido este otro, parecido que no comen los
animales.
-
La
collpa ha venido hasta eso, con el viento
Falta todo…
Las
lágrimas piden perdón y su llanto se vuelve de pronto en una especie de pelea
en pedir o decir vamos ir adelante.
-
Queremos
que nos ayuden con proyectos nosotros vamos a seguir adelante, la gente se está
yendo a Chile, a la Argentina, así estamos
Un
viento golpea los rostros, sus lágrimas han caído al suelo, su respiración se
calma, se avergüenza y sonríe como disculpándose, al frente sobre el piso,
flota un lago que no existe, sonriendo agua en una tumba de polvo…
Nota.-
Visita a Pueblo Urus en el Lago Poopó, las lluvias se anuncian pero el lago
sigue languideciendo.
Villañeque, sábado 22 de diciembre
Edgar
Jorge Rodríguez Alánez
C.I.
3081317 – Or.
*
Ha estudiado Ingeniería Química y trabaja en el área de Medio ambiente y
Seguridad Industrial.
Mujer Uru – Vilañeque – Lago
Poopó -Oruro
Visita Villañeque 22/12/2018
Muy conmovedor, triste y lamentable, pero es la realidad en la cual se vive, solo queda seguir porque culpables y responsables muy difícil de encontrar.
ResponderEliminar